CÓMO CELEBRAR LA VICTORIA DE SCHWARZENEGGER
Como seguramente ya habréis oído demasiadas veces, Arnold Schwarzenegger será el nuevo gobernador de California. Antes de achacar su victoria a la imagen de estupidez que tenemos del americano medio, debemos considerar que él era el único candidato "tomable-en-serio" que representaba el cambio con respecto a la desastrosa gestión de Gray Davis, y que, aún siendo republicano, es bastante moderado el hombre. La fama como actor fue otra de sus bazas, claro está, pero por muy ignorante, trigger-happy y white-trashero que sea el electorado, quiero pensar que no metieron la papeleta en la urna pensando en cómo Arnie destrozaría a balazos a los enemigos del estado. Las predicciones la plataforma Californians Against the Costly Recall, que aseguraban que cuantos más candidatos se presentasen, más grande sería la probabilidad de que una pequeña minoría de votantes controlara el futuro de California, se probaron falsas: pese al gran número de candidatos, el voto se concentró en tres.
En fin, otra región más del mundo gobernada por fascistas, y el amiguete Larry Flint mordiendo el polvo. Más nos vale tomárnoslo con humor y dos tazas de filosofía... Que suene la fanfarria de la 20th Century Fox, que azoten al leon de la metro para que ruja, porque Snob Productions presenta:Cómo celebrar la victoria de Schwarzenegger 1 - Abra una botella de la mejor cosecha de Falcon Crest, caldo de mala leche cultivado en los viñedos californianos.
2 - Organice un maratón de video con títulos como Junior, Poli de Guardería, Un Padre en Apuros, Batman & Robin y demás highlights de la carrera del futuro gobernador.
3 - Pida por correo el cursillo de musculación de Charles Atlas. El primer paso hacia el poder.
4 - Bájese la canción California Uber Alles, de los Dead Kennedys. Aquí tiene la letra.
5 - Trate de cantarla cambiando "Jerry Brown" (el gobernador californiano por aquellas fechas) por "Schwarzenegger", y "Now it's 1984" por "Now it's 2004". Procure mantener la rima y métrica. Asómbrese porque, aunque hayan pasado 20 años, mantiene su validez. Y además, mola.
Como seguramente ya habréis oído demasiadas veces, Arnold Schwarzenegger será el nuevo gobernador de California. Antes de achacar su victoria a la imagen de estupidez que tenemos del americano medio, debemos considerar que él era el único candidato "tomable-en-serio" que representaba el cambio con respecto a la desastrosa gestión de Gray Davis, y que, aún siendo republicano, es bastante moderado el hombre. La fama como actor fue otra de sus bazas, claro está, pero por muy ignorante, trigger-happy y white-trashero que sea el electorado, quiero pensar que no metieron la papeleta en la urna pensando en cómo Arnie destrozaría a balazos a los enemigos del estado. Las predicciones la plataforma Californians Against the Costly Recall, que aseguraban que cuantos más candidatos se presentasen, más grande sería la probabilidad de que una pequeña minoría de votantes controlara el futuro de California, se probaron falsas: pese al gran número de candidatos, el voto se concentró en tres.
En fin, otra región más del mundo gobernada por fascistas, y el amiguete Larry Flint mordiendo el polvo. Más nos vale tomárnoslo con humor y dos tazas de filosofía... Que suene la fanfarria de la 20th Century Fox, que azoten al leon de la metro para que ruja, porque Snob Productions presenta:
2 - Organice un maratón de video con títulos como Junior, Poli de Guardería, Un Padre en Apuros, Batman & Robin y demás highlights de la carrera del futuro gobernador.
3 - Pida por correo el cursillo de musculación de Charles Atlas. El primer paso hacia el poder.
4 - Bájese la canción California Uber Alles, de los Dead Kennedys. Aquí tiene la letra.
5 - Trate de cantarla cambiando "Jerry Brown" (el gobernador californiano por aquellas fechas) por "Schwarzenegger", y "Now it's 1984" por "Now it's 2004". Procure mantener la rima y métrica. Asómbrese porque, aunque hayan pasado 20 años, mantiene su validez. Y además, mola.
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