A GOLPES CON LAS COSAS
Más que comer helado viendo Los Soprano, más que escuchar blues arrastrado con la única compañía de la lluvia y el viento en las ventanas, más que el aroma que desprenden los fósforos al encenderse. Si hay algo que me gusta en este mundo, es discutir. Por el placer de llevar la contraria y dar un par de golpes en la mesa, sería capaz de argumentar que Dios creó a los bebés foca, el pueblo palestino y las personas pobres con el único fin de servirnos como alimento y diversión.
Más que comer helado viendo Los Soprano, más que escuchar blues arrastrado con la única compañía de la lluvia y el viento en las ventanas, más que el aroma que desprenden los fósforos al encenderse. Si hay algo que me gusta en este mundo, es discutir. Por el placer de llevar la contraria y dar un par de golpes en la mesa, sería capaz de argumentar que Dios creó a los bebés foca, el pueblo palestino y las personas pobres con el único fin de servirnos como alimento y diversión.
Un entrañable individuo, de nombre Fluzo, ha cagado una perla negra en los comentarios de mi anterior post. Yo a este caballero no lo he tratado con anterioridad, y desconozco los motivos que lo han llevado a mecanografiar semejante genialidad. Puede que sólo estuviera intentando ponerse en evidencia, puede que esto sea una invitación al duelo, la típica bofetada con guante al estilo weblogger. Lo reproduzco a continuación, a ver qué opinan ustedes:
Gordo cabrón, ojalá te mueras. Son los weblogs como el tuyo los que hacen que la blogoesfera sea una puta mierda. No sé a qué es debido pero me provocas un profundo e irracional ASCO.EDIT (13/10/04): Por lo visto, el troll que nos honra con su presencia no es este Fluzo, sino otro individuo que se hace pasar por él, práctica que al parecer está muy de moda últimamente. Le ruego acepte mis disculpas por el malentendido, Señor Fluzo Original. Y usted, Señor Fluzo Facsímil, es un merluzo.
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